05/07/2006 - LA SATISFACCION DE BATASUNA
El desgraciado accidente ocurrido en Valencia con el trágico resultado de víctimas, ha sido causa del aplazamiento de la reunión que hoy debía mantener el PSE con Patxi López a la cabeza y representantes de la ilegalizada Batasuna que, en gran parte, siguen siendo la referencia de la izquierda abertzale en el país vasco. Como en tantas otras ocasiones, un suceso extraño y de otra índole como la catástrofe del metro valenciano, ha desviado la atención de políticos y ciudadanos por unas horas, pero no ha difuminado los rasgos esenciales del encuentro aplazado que para los medios más politizados de la derecha constituye un delito, para algunos sectores de víctimas del terrorismo una traición abyecta, en tanto otros sectores que consideran el final del terrorismo como premisa indispensable de la solución al problema vasco, entienden que es indispensable el encuentro. ¿Para qué?
La respuesta viene dada por la propia situación ilegal de batasuna y su consideración de brazo político de ETA, lo que exige que se intente orientarla a su plena legalidad a la par que se negocia el fin definitivo de la violencia de su brazo armado que, si bien va a tener su proceso independiente y previo a toda negociación sobre el futuro político de Euzkadi, tiene un ineludible engarce con el curso político de la formación abertzale y los derechos políticos de muchas decenas de miles de ciudadanos vascos.
Pero la inmediata reunión tiene poderosos enemigos que están moviendo a la opinión pública y tratan de influir por todos los medios para que los jueces, sustancialmente el juez Garzón recién incorporado al juzgado nº 5 de la Audiencia Nacional, impidan la reunión, sin descartar otras iniciativas ante otros órganos jurisdiccionales por más que carecen de cualquier posibilidad de éxito. Porque la reunión programada para mañana se producirá entre los dos representantes del PSE y posiblemente tres personas que ostentaron la representación batasuna, pero que hoy son unos ciudadanos con nombre y apellidos que personifican los planteamientos de la izquierda abertazale, muy heterogénea salvo en sus exigencias independentistas. Esta actuación, difícilmente se puede considerar delito.
Y para enredar más las cosas, los portavoces de dicha izquierda van de fanfarrones y sobrados atribuyéndose victorias que solo están en su imaginación, porque en la realidad han sido los derrotados como organización y como fuente ideológica. Es posible que la actitud de satisfacción tenga mucho que ver con la necesidad de vender a sus bases que sus planteamientos han salido triunfantes porque en las declaraciones de Rodríguez Zapatero se hace referencia a respetar la decisón política del pueblo vasco, pero ocultan que expresamente se enmarca tal voluntad en el respeto a las normas y a la Constitución y que no está en discusión el derecho de autodeterminación que "no existe".
En este escenario en el que concurren estrategias y posiciones muy diversas, parece acertado que el encuentro de mañana se limite a una primera fijación de objetivos que signifique el primer paso para la legalización de batasuna para que pueda participar en el proceso democrático de normalización de Euzkadi. Los siguientes pasos deben quedar supeditados al fin definitivo de la violencia y la voluntad de los etarras de disolver su organización criminal, lo que constituye un proceso independiente con unos contenidos que serán abordados excluyendo la negociación política, que no puede darse bajo amenaza o condiciones.
León Buil Giral